Diabetes tipo 2:
¿Sus síntomas y cómo afecta a nuestro cuerpo?

Diabetes tipo 2: ¿Qué otras partes del cuerpo puede afectar?

Ignorar las complicaciones que la diabetes tipo 2 puede generar, resulta muy fácil. En especial en las etapas iniciales, cuando te sientes bien y la asocias con el cansancio o estrés. Sin embargo, la diabetes puede afectar a muchos de los órganos principales del cuerpo como: el corazón, los vasos sanguíneos, los nervios, los ojos y los riñones. Controlar tus niveles de azúcar en sangre te ayudará a prevenir estas y otras complicaciones.¹

Las complicaciones por causa de la diabetes se desarrollan de forma gradual conforme avanza la enfermedad. Lo que ocasiona que se dañen los nervios, se pierdan las capacidades corporales e incluso provoquen la muerte.¹

¿Sabías que la diabetes es una causa importante de daño en los nervios?

El daño en los nervios también se conoce como neuropatía y puede causar hormigueo, dolor o entumecimiento que inicia en la punta de los dedos de los pies y manos; y se extiende gradualmente.¹

Además, el daño puede ocasionar problemas en los nervios que controlan la digestión.¹

Algunas de estas señales podrían indicarte daños en los nervios:²

• Tienes entumecimiento, hormigueo o dolor en los dedos, piernas, manos, brazos.
• A menudo sientes plenitud estomacal o vomitas mucho.
• Tienes problemas para evacuar.
• Te sientes mareado o débil.
• Has tenido pérdida del apetito sexual o capacidad para tener relaciones sexuales.

¿Cómo protegerte contra el daño de los nervios? ³

Puedes hacer muchas cosas para ayudar a disminuir las probabilidades de tener daño en los nervios. Y si ya tienes daño en los nervios, esto te puede ayudar a que no empeore.

• Habla con tu médico, quien puede diagnosticarte neuropatía con base en tus síntomas y una exploración física.
• Trata cualquier problema, incluyendo el entumecimiento, hormigueo, dolor, problemas con la digestión, problemas para evacuar o problemas para tener relaciones sexuales.
• Mantén tu glucosa en sangre, presión arterial y colesterol bajo control.
• Pide a tu médico que te revise tu hemoglobina glicosilada por lo menos 2 veces al año.
• Toma tus medicamentos prescritos.
• Mantén un peso adecuado y sigue las recomendaciones dietéticas de tu médico o nutricionista.
• Deja de fumar.
• Limita el consumo de bebidas alcohólicas.

Si llegaras a presentar algún síntoma como entumecimiento, hormigueo o dolor es importante hablarlo con tu médico.